Verdades y mentiras acerca del acne
El acné, barros, espinillas o granos se producen con frecuencia entre los adolescentes por los cambios hormonales de la pubertad. No es un motivo de alarma, pero sí una incomodidad estética a la que a esas edades se asogna mucha importancia, de modo que abundan los "remedios", consejos y mitos no siempre correctos.
Si aclaramos algunas cuestiones sobre el acné, le haremos un gran favor a tu piel.
Mito Nº 1: Lo que hay que hacer con los granos es reventarlos
¡Ni se te ocurra! Te dirán que si te revientas los granos, se notarán menos y se curarán más rápido, pero es falso. Apretar los granos hace que los gérmenes penetren más profundamente en tu piel, lo que podría provocar un enrojecimiento mayor, dolor, e incluso una desagradable infección. Y si revientas los granos podrían quedarte cicatrices. Lo que tienes que hacer es acudir al dermatólogo, que es quien puede ayudarte a controlar el acné.
Mito Nº 2: Comer comidas fritas o chocolate causa espinillas.
No. Eso no significa que una dieta saludable no sea beneficiosa para tu salud general, incluida la de tu piel, pero no hay una relación directa entre el chocolate o la ingesta de grasas y el acné.
Mito Nº 3: El Bronceado elimina el Acné.
Tomar sol no mejora las espinillas. Con el bronceado, la apariencia de la piel mejora, pero cuando el bronceado se va, los granos siguen allí. Eso sin olvidar los peligros que tiene la exposición excesiva al sol.
Mito Nº 4: Puedes deshacerte del acné si te lavas la cara más seguido.
Lavarse la cara en forma regular es una buena idea en cualquier caso. Pero lavar demasiado o frotar la piel demasiado fuerte puede irritarte la piel, lo que empeorará el problema.
Por regla general, lava suavemente tu cara no más de dos veces por día con un limpiador o jabón suave. Después de lavarla, sécate con una toalla suave. No utilices exfoliantes .
Mito Nº 5: Si quieres evitar el acne, no te maquilles.
No es imprescindible renunciar al maquillaje, pero asegúrate de elegir productos que sean "no comedogénicos" o "no acnegénicos" (que no taparán los poros).
Mito Nº 6: Si te siguen saliendo granos a pesar de los medicamentos, hay que aumentar la dosis.
Si los medicamentos de venta libre no te ayudan con tu problema de acné, es posible que necesites ver a un dermatólogo.
Si utilizas demasiada medicación para terminar con tus granos, es posible que tu piel se reseque o irrite. Es incluso posible que con una dosis excesiva sufras efectos colaterales desagradables o incluso peligrosos. Asegúrate siempre de seguir las instrucciones.
Recuerda también que los medicamentos a veces necesitan un tiempo para hacer efecto, incluso pueden pasar 8 semanas antes de que notes una mejoría. Si no la notas, habla con tu doctor y él hará los ajustes necesarios.
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